Ana Beatriz, hija de Rubby Pérez, a cinco meses del colapso del Jet Set: «Te extraño con el alma, paaa»

Ana Beatriz, hija de Rubby Pérez, a cinco meses del colapso del Jet Set: «Te extraño con el alma, paaa»

Santo Domingo.– A cinco meses de la tragedia del Jet Set, que tiñó de luto a la República Dominicana, Ana Beatriz Pérez, la hija menor del inolvidable merenguero Rubby Pérez, compartió un mensaje cargado de dolor y nostalgia, recordando la ausencia de su padre.

Con apenas 15 años, la joven expresó desde lo más profundo de su corazón lo difícil que han sido estos meses sin él:
“Otro mes más sin ti. Los días pasando. Y sin ti. Siempre sin ti. Y en esta tierra solo esperamos respuestas de Dios. Mientras tanto, te extraño con el alma, paaa”, escribió en sus redes sociales, con palabras que reflejan la vulnerabilidad y el vacío que dejó la partida de su padre.

El pasado 8 de abril, a la medianoche, el país quedó paralizado cuando el techo de la icónica discoteca Jet Set colapsó mientras cientos de personas disfrutaban de una noche de entretenimiento. El siniestro dejó un saldo devastador: más de 200 fallecidos y más de un centenar de heridos. Entre las víctimas se encontraba Rubby Pérez, una de las voces más queridas y respetadas del merengue, cuya pérdida estremeció a toda la nación.

La tragedia, que marcó a cientos de familias dominicanas, sigue siendo objeto de un proceso judicial. La jueza Fátima Scarlette Veloz Suárez, del Décimo Juzgado de Instrucción del Distrito Nacional, impuso una garantía económica de RD$50 millones, impedimento de salida y presentación periódica contra los propietarios de la discoteca, Antonio y Maribel Espaillat.

El Ministerio Público, que había solicitado prisión preventiva para Antonio y arresto domiciliario para Maribel, expresó su inconformidad con la decisión, alegando que la medida no refleja la magnitud de la tragedia. Aun así, el tribunal declaró el caso como complejo, manteniendo viva la expectativa de justicia.

Hoy, las palabras de Ana Beatriz no solo revelan el dolor de una hija que extraña a su padre, sino también el eco del duelo que aún persiste en un país que, a cinco meses del desastre, sigue buscando respuestas y consuelo.